La exploración de los objetos normales

–¿Cree que la Física todavía es la gran desconocida para el gran público?–

En gran parte es muy desconocida. Es verdad que la Cosmología y las partículas elementales tienen un gran “glamour”, y hay bastante interés en lo más grande, los confines del universo, y en lo más pequeño, los constituyentes últimos de la materia. En bellas palabras de Alberto Galindo “el alfa de la gran explosión y el omega de la desintegración de la materia”. La exploración de lo más grande o de lo más pequeño puede ser contrastada con otro tipo de física, específicamente el intento de entender basados en la física cuántica el mundo ordinario aquí y ahora: los materiales o la nanotecnología por ejemplo. Este tipo de exploración de la naturaleza real de los objetos “normales” no despierta tanto todavía el interés del gran público pero tiene una fascinación intelectual, que siendo quizás un poco más sutil, no es menos atrayente ni menos fascinante que el de otros tipos de física y en muchos casos es más exigente por tenerse que ceñir a las limitaciones de la misma realidad aquí y ahora. Es la que ha contribuido de forma decisiva a muchas de las tecnologías modernas.–

¿Es la física cuántica una disciplina sólo para una élite preparada?

–La física cuántica de la materia no es una teoría abstracta que importe solamente a algunos especialistas, gran parte de la tecnología que nos rodea está basada en la física cuántica, –la resonancia magnética nuclear, el transistor y toda la microelectrónica, el láser–. Fundamentos sutiles de la mecánica cuántica están empezando a ser utilizados para procesar información (ordenadores cuánticos) y disfrazarla (criptografía cuántica). La física cuántica es quizás la gran revolución conceptual del siglo XX. Es omnipresente. La física cuántica del enlace químico y de la difracción de rayos X está en la base de la segunda gran revolución biológica: el descubrimiento de la estructura de doble hélice del ADN, la molécula que llevamos en cada una de nuestras células como un libro vivo de la historia de la evolución de la vida en la tierra. Los físicos no sólo han aportado a la medicina y a la biología los instrumentos, habilidades y conocimientos adquiridos en la Física sino una actitud, en palabras de Max Delbruck les hemos transmitido la importancia de buscar “explicaciones físicas radicales” para el comportamiento celular. Todo esto además de su utilidad, es hermoso y parte esencial de la cultura, del humanismo moderno, y debemos contribuir a explicarlo, a transmitir a la sociedad que la física es una actividad estéticamente atractiva, culturalmente importante y económicamente decisiva y que es un instrumento esencial para nuestro desarrollo económico y social.

*Fragmento de la entrevista realizada a Pedro Miguel Echenique (Premio Principe de Asturias) en El Cultural