sábado, 7 de marzo de 2009

Relojes

Dali.Mi esposa desnuda






















Hubieras tenido que venir a buscarme.
Si estaba sola
fue porque te esperaba.
A veces adivinar es importante.
Como vivir. Que parece
tan fácil, tan sin nada,
y de repente se derrumba.

6 comentarios:

Isabel Mercadé dijo...

Luisa,
No señalas al autor por lo que deduzco, con lo puntillosa que eres en eso, que el poema es tuyo. Me ha gustado mucho, muchísimo, cómo describes esa esperanza y la imagen de su derrembe.
Un besazo.

Luisamiñana dijo...

Uy, Bel, casi no me has dado tiempo de dejarlo todo en su sitio. Qué alegría que te guste. Gracias. Andaba por ahí olvidadillo el pobre. Voy a ir sacando algunos textos que andan por ahí.
Un beso.

Anónimo dijo...

Que bien reconozco ese sentimiento.
Que bien contada esa ¿decepción? de no verte adivinada.
Precioso.
Besos.

Luisamiñana dijo...

Sí, sí, decepción, claro. Es así. Aunque a veces no tenga más importancia. Pero en el momento es decepción, claro. Sentimiento universal, creo. Besos, niña.

Lamia dijo...

Leo este poema en el momento oportuno. Yo también estaba hoy sola. No lo han adivinado. Y, por eso, vivir a veces no es fácil.

ybris dijo...

Vivir no es fácil por lo frágil.
Adivinar las razones de la soledad, tampoco.
Suerte tendremos si es por esperar.

Escalofríos de leer este poema Luisa.
Es encantador.

Besos.