martes, 8 de septiembre de 2009

Keats por Lobarte en Olifante




El Romanticismo europeo definió una visión de la realidad sobre la que se han fundamentado todas las formulaciones que al respecto ha adoptado nuestro mundo moderno y contemporáneo con posterioridad, quizás incluso hasta ahora mismo. El poeta inglés John Keats (1795-1821) es sin duda, y a pesar de su brevísima existencia y de su aún más breve “carrera literaria”, uno de los autores imprescindibles en la elaboración de aquel corpus romántico trascendental. La revisión periódica de nuestra tradición cultural, de nuestro pasado como civilización, es la forma de incorporar adecuadamente a nuestro presente las referencias anteriores necesarias. Y en este sentido hay que entender esta edición bilingüe de algunos de los poemas más relevantes compuestos por John Keats, traducidos al castellano por Rafael Lobarte.

Rafael Lobarte elige una “traducción rítmica” a nuestro idioma de la nunca fácil métrica inglesa de Keats. Con ello ha conseguido salvar la máxima fidelidad al original, procurando al tiempo que el discurso poético creado hace ya dos siglos mantenga su frescura sonora y se haga permeable a otra lengua, ayudando sin duda así a su mejor comprensión conceptual para los lectores actuales en castellano.

Pasión, Amor, culto a la Belleza, insatisfacción, Melancolía. Estos son algunos de las emociones y conceptos que construyen el esqueleto de la poesía de Keats, pero también de la conciencia escindida de una humanidad moderna a la que quizás estemos ya dejando atrás: “La Fantasía no consigue engañarnos, duende falaz, tan bien como dice la fama” (Oda al Ruiseñor, John Keats).



Este el texto que escribí para la solapa de la "Antólogía poética" de John Keats, publicada por la editorial Olifante (uno de las más prestigiosos sellos de este país en la edición de poesía) y preparada por Rafa Lobarte, que se presenta el jueves, 10 de septiembre, a las 19,30 en la Biblioteca de Aragón (estarán encargados de oficiar: la editora, Trinidad Ruiz, la directora de la Biblioteca de Aragón, Pilar Navarrete, la profesora universitaria Ángeles Naval, y el propio traductor). Los lectores de El Cronista de la Red saben bien de la destreza de Rafa Lobarte como traductor de poesía y tuvieron ya la ocasión de acercarse a alguna de las traducciones que incluye esta antología, publicadas en los primeros números de la revista. Porque Rafa Lobarte lleva un montón de años trabajando estos textos que ha ido perfeccionando paulatinamente. A mi siempre me han parecido unas traducciones exquisitas, absolutamente honradas, estudiadísimas no sólo en los aspectos semánticos, sino igualmente en los rítmicos, un asunto que al poeta Rafa Lobarte preocupa mucho y le ocupa también otro tanto.

Una muestra (no perderse el resto, Keats es mucho Keats y una buena traducción en una estupenda edición - el libro ha quedado precioso- no siempre abundan):



ON THE SEA


It keeps eternal whisperings around
Desolate shores, and with its mighty swell
Gluts twice ten thousand caverns, till the spell
Of Hecate leaves them their old shadowy sound.
Often ‘tis in such gentle temper found,
That scarcely will the very smallest shell
Be moved for days from where it sometime fell,
When last the winds of Heaven were unbound.

Oh ye! who have your eye-balls vexed and tired,
Feast them upon the wideness of the Sea–
Oh ye! whose ears are dinned with uproar rude,

Or fed too much with cloying melody–
Sit ye near some old cavern’s mouth and brood
Until ye start, as if the sea-nymphs quired!




AL MAR

Murmura eternamente alrededor de playas
desoladas saciando con su fuerte oleaje
millares de cavernas, hasta que los ensalmos
de Hécate les devuelve su son viejo y oscuro.
Se le encuentra a menudo de humor tan apacible
que apenas moverá las más pequeña concha
durante muchos días, de allí donde quedara
cuando por vez postrera se desataron vientos.

Quienes tengáis cansados e irritados los ojos,
con el inmenso mar regalad vuestra vista;
si aturdido el oído por terrible alboroto

o de una melodía empalagosa harto,
meditad a la boca de una vieja caverna
hasta que os sobresalte el coro de las ninfas.


4 comentarios:

Rosa dijo...

Maravilloso poema... no hay nada como pasar un rato junto al mar, con el mar, cuando quieres olvidarte del mundo... o reconciliarte con él.
Besos.
Rosa.

Luisamiñana dijo...

Keats es un gran gran poeta; este poema no lo creo de los más conocidos, pero a mi también me gusta mucho, Rosa: por su atmósfera, por su ajustada dicción y discurso preciso y a la vez tan sugestivo, tan evocador, y por el mar, claro, claro.
Un beso, guapa.

ybris dijo...

¿Así que le has escrito la solapa a la traducción de Lobarte en Olifante?
Me pasaré por "El Cronista" para leer o recordar alguna traducción suya.
Tu muestra de hoy es sencillamente genial.

Besos.

Luisamiñana dijo...

La solapa no es sino un trámite editorial. Aunque Olifante es una de las editoriales que más cuida los detalles. Lobarte es amigo y había que hacer la solapa. El libro es muy guapo, lo digo en serio: un libro que ha quedado estupendo, en contenido y en continente. Y las traducciones están en algunos casos depuradas respecto a los texto de El Cronista.
Un besote, Ybris.