jueves, 10 de mayo de 2007

En camilla por la autopista


"El tetrapléjico de Ferrol, José Antonio Navarro, quien fue interceptado por la policía mientras circulaba en su camilla motorizada por una autovía cuando se dirigía a un prostíbulo, ha pedido hoy que se establezcan "más autobuses o taxis adaptados"a minusválidos para evitar incidentes como el que él protagonizó.

Navarro, que padece una discapacidad que afecta al 95% de su cuerpo, fue localizado el pasado viernes por una patrulla de la policía local de Narón cuando circulaba en su camilla motorizada en la autovía AG-64, que comunica Ferrol con la localidad lucense de Vilalba.

Según ha relatado, esa tarde salió del Centro de Atención de Minusválidos Físicos de Sampedro de Leixa, donde reside en régimen abierto desde hace varios años, para dirigirse a un prostíbulo ubicado en las proximidades.

Se equivocó de acceso

Sobre su silla-camilla motorizada, que él mismo maneja con la boca, recorrió varios kilómetros de carretera hasta alcanzar una rotonda en la que, por error, tomó la salida equivocada y se adentró en la autovía. Al percatarse, nada pudo hacer: "Como no podía dar la vuelta para evitar accidentes, tiré todo hacia adelante", ha explicado.

El portavoz de la policía local de Narón, Luis Bodelón, ha indicado que, cuando fue interceptado por la patrulla de la policía, Navarro "había recorrido ya cerca de dos kilómetros" de la autovía ya que, según ha precisado, el vehículo en el que se desplaza puede alcanzar una velocidad de 20 kilómetros por hora.

La patrulla policial desplazada hasta el lugar, se llevó al discapacitado en una ambulancia y, posteriormente, en un vehículo de Protección Civil, y trasladaron su silla hasta el centro en el que reside, donde lo recibieron, recordó, "de cachondeo".

Navarro, que acostumbra a salir diariamente del centro para pasear por las inmediaciones, se ha quejado de lo "lejos" que está del núcleo urbano y de la escasa señalización. Por ello, ha demandado que se establezca una línea de autobuses o "taxis adaptados" para que los internos del centro puedan salir a la calle sin correr riesgos."


-----------------------------


Buena parte de la prensa de hoy se hace eco de la noticia que reproduzco arriba desde El Periódico. Las versiones que he leído son diversas. Esta de El Periódico recalca con intención que el protagonista del hecho se dirigía a un prostíbulo. Seguramente han querido añadir un elemento chusco al tema, puesto que esta noticia aparece en la sección !Vaya Mundo!, junto a esta otra: "Presentado un dispensador de papel higiénico de oro y diamantes valorado en 100.000 euros". Reconozco lo chocante del asunto de la camilla, pero ¡ya les vale!.

El caso es que a mi me da igual a donde fuera este hombre en su original vehículo. Tiene el mismo derecho que cualquiera a ir donde le de la gana. El sabrá. Y con lo que me quedo es con su llamamiento sobre la escasez de vehículos públicos adaptados: autobuses o taxis.

Los autobuses son a todas luces insuficientes y sólo útiles si tienes una ruta muy establecida y a horarios fijos, y aún así hay que hacer lista de espera (por lo menos en Zaragoza). Y los taxis adaptados, -cada vez menos porque ningún propietario de taxi adapta su vehículo sin subvención y éstas escasean,- le salen al usuario por un ojo de la cara, precisamente porque esas subvenciones son esqueléticas. Como son caros se usan poco, y como se usan poco, son caros.

En fin, que al cabo cada cual se resuelve el problema como puede (véase el caso del que partimos). Aunque circular con vehículo adaptado, del tipo que sea, tampoco es fácil, como ya he dicho otras veces. Este hombre, por lo menos, se lo lleva incorporado. Y desde luego hay que alabarle el derroche de imaginación y la destreza en la conducción (aunque esta vez se haya pasado un pelín metiéndose en una autovía).




* La foto es de EFE.

10 comentarios:

entrenomadas dijo...

Me he quedad muda. No hay words for this.

Anónimo dijo...

De todas formas, ¿que hace este señor SOLO?

Anónimo dijo...

Yo creo que sí hay palabras. Fuera de lo anecdótico del hecho, que es con lo que se ha quedado la prensa. Si empezamos a pensar, salen montones de cuestiones ligadas a un hecho tan simple como que un señor sin movilidad quiera llevar una vida normal.

Besos, besos.
P.D. ¡Toy mejor!

Anónimo dijo...

Supongo, Inma, que eso, intentar llevar una vida normal. A lo mejor está un poco pallá, quizás, no lo sé, pero míralo desde este otro punto de vista: ¡tiene reaños, el tío!
No sé, todo es muy sutil en estas circunstancias.
Besos, desde este espejo.
P.D. Je, al final será divertido ésto de tener dos blogs.

Chalá perdía dijo...

Es algo asombroso, en todos los sentidos. Es difícil no reírse (lo siento) con esa risa que se usa para desdramatizar el drama.
Es cierto que no importa el destino de este señor, pero es formidable que estando en esas condiciones vaya al puticlub, solo, motorizado y por la carretera.
Hay ocasiones en que no hay límites para la voluntad osada.

Anónimo dijo...

Es verdad, MM, mueve al asombro y a la carcajada: es buñuelesco, totalmente. Lo que pasa es que luego, cuando quitas de delante la imagen de este hombre, pues empiezas a darle vueltas a todo lo que ha rodeado el hecho de que se produjera la noticia y al tratamiento que ha tenido. De todas formas, ejemplos de este tipo sirven también para desdramatizar un poco, que viene bien igualmente.

Anónimo dijo...

Mima, te había contestado también al comentario en el otro lado del Pan. Pero ha desaparecido. Con el asunto del coreano y todo. Y ahora no me deja ni entrar. En fin.

Anónimo dijo...

¡que no, que el que se ha esfumado es tu comentario, Inma, coreano a cuestas! Jolín con blogia.

ybris dijo...

No soy persona que se escandalice por hacer chistes de lo que caiga porque entiendo que no hay mejor camino de la normalización que aceptar las limitaciones como limitaciones y no tomar por ofensas lo que son bromas.
Pero, por supuesto, dejando claro, como decía el clásico que "seria serie" lo serio, en serio.
Y aquí hay que darte la razón en que de aquí hay que huir del chiste fácil y plantear con toda su crudeza el problema de la movilidad de los discapacitados.
No parece tan difícil encontrar una solución a algo tan elemental como facilitar la vida o los que ya la tienen suficientemenbte complicada.

Besos.

Luisamiñana dijo...

Yo tampoco me suelo escandalizar de las cosas en sí, sobretodo si hay un tono de humor, que creo siempre sano. Me ha fastidiado en este caso la ubicación de la noticia y el tono del enfoque porque era lo fácil. Cuando creo, como tú bien dices, que queda mucho camino por recorrer hasta que nos podamos permitir echar sacos de humor sin que algo rechine por debajo.
Además, como dice 39 escalones en el OtroPan, este hombre dijo por la radio que iba al puticlub porque era el único bar donde podía entrar sin problemas de la guisa en que él lo hace.
Besos.