Toda mi vida he escuchado que para aprender un idioma lo mejor es sumergirse a tope en el país donde se hable ese idioma. Cientos de miles de españoles habrán ido al Reino Unido a estudiar inglés. Miles de nuestros jóvenes han pasado veranos y cursos estudiando inglés y trabajando en bares, restaurantes, hoteles, casas familiares... de lo que sea: conociendo la gente, las costumbres, la comida, los transportes, en fin las situaciones cotidianas. Y todos los pedágogos han estado de acuerdo en que era una forma óptima de enseñarle al cerebro las estructuras y vocabulario de un idioma. Porque un idioma se aprende mucho mejor si se conoce la sociedad que lo habla.
Yo siempre he pensado que una sociedad se conocía explorándola. Que por eso, por ejemplo, se viaja, para conocer otros pueblos, otras culturas.
Pero ahora la Generalitat y el ministro Corbacho me han sacado de mi error.
El ministro Corbacho y la Generalitat de Catalunya han descubierto que lo mejor para que los jóvenes inmigrantes conozcan Catalunya es separalos de sus familias inmigrantes y de la cotidianeidad catalana y agruparlos en unos "Espacios de bienvenida educativa", en los que durante un tiempo - no he conseguido saber realmente cuánto se ha pensado que sea- serán aleccionados convenientemente. Supongo que sobre lo que pueden y no pueden ser y hacer en Catalunya. Va a haber cuatro de esos espacios. Tres en Reus y uno en Vic. ¿Qué es ésto?
Claro, - ¡seré torpe!- no es lo mismo un joven estudiante del primer mundo que un joven inmigrante asiático o africano. La capacidad de aprender y de adaptación de unos y otros debe ser indirectamente proporcional a su procedencia y a su disponibilidad económica.
Añoro los tiempos en que Catalunya era el pueblo más cosmopolita de la Península Ibérica. Y no me gustaría pensar que lo fue sólo porque eran suecos, ingleses y alemanes con dinero quienes llegaban a sus playas.
Corbacho ha calificado este plan de la Generalitat catalana como "valiente". Empieza a preocuparme que se nos quiera confundir tan burdamente en los antónimos. Este es un plan síntoma de una sociedad cobarde y en retirada.
7 comentarios:
¿Espacios de "bienvenida educativa"?..arg, pero ¿que es esto?...querida, y nosotras soñando con esa escuela inclusiva imprescindible...para atrás, y mucho más rápido que los cangrejos creo yo.
Besos de lunes
Según la R.A.E., cobardía: Falta de ánimo y valor.
Si sólo fuera esto, pero me temo que hay algo más: ruindad
Besos
Desde luego, al publicitario que crea los eufemismos políticos deberían darle ya un Nobel, un Cervantes, un puesto vitalicio en la RAE o un mes en las Bahamas, porque vaya imaginación... Qué forma de llamar un verdadero guetto educativo... Pero ya lo dijo Pujol, ese gurú al que muchos siguen, la inmigración desvirtúa la esencia de Cataluña. ¿Qué esencia? La que sólo existe en su imaginación, claro.
Besos
¿Guantanamo es entonces un Espacio de Bienvenida Penitenciaria?
Hoy Carmen Tomás publica un artículo sobre el mismo tema en El Periódico de Aragón, en el que también usa el término blindaje y critica esos "espacios" que dejan "la puerta abierta a la arbitrariedad a crear guetos, a l estigmatización de los niños diferentes"
http://www.elperiodicodearagon.com/noticias/noticia.asp?pkid=425215
(pelos de punta se me ponen)
Os facilito el enlace al Manifiesto en contra de este despropósito
http://www.aulaintercultural.org/article.php3?id_article=3014
Es una vergüenza, coño.
Publicar un comentario