Monasterio de Rueda (foto: Miguel Angel Latorre, copyleft)
Hoy concluimos las entregas periódicas de La arquitectura de tus huesos. El capítulo final está programado para las 18 horas, concretamente. Comenzamos exactamente el 3 de abril de 2008. Ha sido, por tanto, algo más de un año durante el cual, domingo a domingo -salvo breves periodos de descanso- hemos subido y contextualizado las diferentes partes del esqueleto de esta arquitectura, que ante todo es mezcla voluntaria de fórmulas, maneras, géneros, disciplinas, formas de leer y de estar. Arquitectura de huesos o teoría de cuerdas: cada texto, cada imagen puede transformarse según sea vehículada y percibida, y en realidad todo sentido depende de su ubicación.
Terminamos, pues, pero menos. La arquitectura de tus huesos tiene pendiente un último y decisivo capítulo: el próximo sábado, 25 de abril, en la librería zaragozana El pequeño Teatro de los Libros (Silvestre Pérez, 21, a las 18 horas). Allí, de la mano de Javier López Clemente, daremos una vuelta más de tuerca al invento. Le pondremos carne y piel al esqueleto, reconstruiremos la instalación en otras coordenadas. El resultado de esa corporeización será reintegrado después a la red y el ciclo se cerrará. Se cerrará por nuestra parte. Por la vuestra esperamos que no: La arquitectura permanecerá orbitando entre los universos paralelos de vuestras interpretaciones. Vuestra es. Buen viaje.
Y GRACIAS A TODOS: ha sido i-n-c-r-e-í-b-l-e: GRACIAS.
7 comentarios:
Tu arquitectura tiene mucho calcio y palabras por recorrer.
Mucha vida y muchos lectores nuevos.
Kisses,
M
Gracias por descubrirme esta nueva forma de leer, una ventana al mundo sin cerraduras. Espero que haya más. Besos
Estupendo, llego al último. Pero nunca es tarde si la dicha es buena.
Las páginas de internet también se dejan leer hacia atrás, afortunadamente.
Un saludo, Luisa.
Me he permitido enlazarte en mi blog para venir más fácilmente.
Enhorabuena preciosa...y gracias a ti por todo
Enhorabuena a los premiados por tanto y tan buen curro. Colofón por todo lo alto.
Besos luneros y convalecientes.
Enhorabuenísima por ese espléndido trabajo que nos ha abierto una puerta a otra forma de leer y contemplar las cosas.
Que bueno tenerlo a mano.
Espero con interés noticias del colofón en ese marco espléndido (lástima no poder estar allí el 25)
Besos rendidos jefa.
Muchísimas gracias a todos. De verdad. Un placer.
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